Mi consejo es que antes de los 30 hay que apuntar muy alto, todo lo que podamos. No hay nada que perder.
Solemos sobreestimar lo que podemos conseguir en un año, pero subestimamos lo que podamos conseguir en diez años. Si pudiera volver atrás en una máquina del tiempo apuntaría mucho más alto de lo que hice.
No hay que tener miedo a tomar riesgos y caer, porque visto en perspectiva esos son siempre los momentos de mayor aprendizaje.
Tus sueños tienen que ser mucho más grandes que tu pasado.
Yo tengo grandes planes para mis próximos 10 años, ¿y vosotros?